Enclavada en el núcleo de Buira, recibe el nombre de San Hilario, con referencias también a San José. Edificio restaurado, sólo queda parte de la bóveda de cañón que la cubría. Adosada se encuentran los restos de la sacristía y sobre la entrada estaría el coro y el acceso a la torre de planta cuadrada, que cuenta con pisos interiores y espadaña con función de campanario. Para finalizar, el conjunto lo completa un pequeño cementerio delimitado por muros y emplazado anexo al sur de la nave.
En lugar poco frecuente, a mitad altura de la fachada oeste y descentrado, y debido a su reutilización, encontramos un interesente sillar con crismón románico.
La iglesia tiene origen románico, aunque de ya entrado el siglo XIII, aunque con distintas fases más modernas que no le restan atractivo e interés. Su interior albergaban importantes bienes muebles como el frontal de San Hilario, la Arqueta de Buira o la capita portaviáticos de Buira.